Saltar al contenido

El milagro de “The Leftovers”

09/12/2015

The Leftovers Season 2 (1)

(AVISO SPOILER: Terminantemente prohibido leer sin haber visto “I Live Here Now”, el décimo y último episodio de la segunda temporada de “The Leftovers”)

Desde Mapleton, Nueva York, hasta Jarden, Texas, una pequeña ciudad rodeada y protegida por el parque nacional de Miracle. Ése ha sido el trayecto geográfico que “The Leftovers” ha recorrido entre su primera y su segunda temporada, en el plano argumental. Pero la serie ha realizado un viaje mucho más grandioso, profundo y trascendente, en lo esencial: ha cruzado con éxito esa peliagudísima frontera que separa las buenas series de las jodidas obras maestras. Porque en esto último es en lo que se ha convertido la creación de Damon Lindelof y Tom Perrotta con su segunda tanda de diez episodios. Diez genialidades que nos han ido endosando, una tras otra, durante dos meses. Sin descanso. Sin clemencia. Sin apiadarse lo más mínimo de nuestros corazones y nuestras cabezas. Pocas series han conseguido jamás tenernos tan en vilo semana a semana, calarnos tan hondo, golpearnos con tanta fuerza donde más nos duele, y aturdirnos (en el mejor sentido) por el camino con sus rompecabezas y sus juegos narrativos como esta “The Leftovers” que cerró su segunda (¿y definitiva?) temporada el pasado domingo 6 de diciembre. Virtudes, todas ellas, que ya estaban ahí el año pasado, aunque un tanto lastradas por sus imperfecciones, o con menos brillo con el que han refulgido en esta superlativa continuación. De ahí que, después de que mi compañero Jorge diseccionara a la perfección su primera temporada en su post «La deriva emocional de “The Leftovers”» , un servidor estuviese tentado de titular esta entrada «El terremoto emocional de “The Leftovers”». Imaginaos.

Mucho ha cambiado, para mejor, la serie en el plazo de dieciséis meses, y más valor tiene que lo haya hecho sin traicionarse a sí misma. Aquellos que disfrutamos de su puesta de largo, los que nunca llegamos a dudar de ella a pesar de su abrupto recorrido y la aridez de su propuesta, y que llegados al final obtuvimos sobradamente nuestra recompensa, esta vez hemos recibido un regalo muchísimo mayor. Audiencias aparte, éste parece haber sido el sentir general de público y crítica. Una de las series que más debates, discusiones y sentimientos encontrados levantó en 2014, en este 2015 ha sido elogiada y encumbrada a lo más alto de forma prácticamente unánime. Cierto es que debemos recalcar que “The Leftovers”, una vez más y no es extraño viniendo de la HBO, no es ni mucho menos para todos los públicos. Pero todos aquellos para los que este tipo de productos es puro veneno ya estaban sobradamente prevenidos y se habrán alejado de ella como de la peste, con buen juicio. Esta temporada estaba exclusivamente diseñada para los que nos quedamos. Que no seremos muchos, pero a estas alturas estamos total e incondicionalmente entregados. Y, aviso, podemos llegar a ser muy ruidosos y pesados.

The Leftovers Season 2 (3)

Las novedades se vislumbran ya desde sus remozados y, en mi opinión, mucho más bellos y expresivos títulos de crédito. Cambiamos la severidad del apocalíptico tema principal de Max Richter que acompañaba el opening original por la deliciosa ligereza folkie del “Let the Mystery Be” de Iris DeMent, y dejamos atrás la imaginería bíblica y tremendista para contemplar una serie de estampas cotidianas, luminosas y felices… salvo que si algo destaca es la ausencia de aquellos que ya no están, o peor aún, están aunque ya no estén. El conjunto no puede ser más triste y sugerente. Aquí hay debate, y hay quien prefiere de largo los del año pasado. Yo creo que éstos, lejos de restarle gravedad a la serie, le dan aún más dramatismo y simbolizan mucho mejor todo lo que representa. Tampoco creo que podamos profundizar mucho más, ni debamos buscar elementos ocultos, más allá de que a mí, como apunte friki, me encante el guiño a “Friday Night Lights” cuando vemos en pantalla el nombre de Peter Berg.

The Leftovers Season 2 (6)

Pero el gran acierto, que además arrastra todo lo demás, es el mencionado cambio de localización de Mapleton a Jarden, o mejor dicho, a Miracle. Esto nos permite prescindir de personajes que ya no podían aportar nada a la trama, introducir caras nuevas, con unos resultados magníficos, y quedarnos con las figuras verdaderamente importantes, mientras vemos cómo luchan desesperadamente por dejar atrás sus fantasmas e intentan construirse una nueva vida partiendo de cero… algo que sabemos que es imposible. Jarden, o Miracle, es además un lugar fascinante, extraordinario y único en el mundo, por lo que es el escenario perfecto para que ocurran cosas igual de fascinantes, extraordinarias y únicas. El propio Lindelof ha adelantado que, si la HBO da luz verde a una tercera temporada de “The Leftovers”, a pesar de lo bien que les ha salido la jugada esta vez, no habrá un nuevo viaje y la ficción permanecerá en donde está. Porque, según sus propias palabras, «un mago no repite el mismo truco dos veces». Pero también ha jugado con nosotros (no puede remediarlo) mencionando varias veces de pasada Australia, o confirmando que Kevin Garvey Sr. aún podría tener la llave de muchos de los misterios que aún rondan por ahí (¿sabremos alguna vez qué escondía el maldito “National Geographic” de mayo de 1972?).

The Leftovers Season 2 (7)

  • There are no miracles in Miracle.

Jarden, o Miracle, ha servido también como emplazamiento ideal para que los responsables de la serie hayan continuado manejando con maestría una de las, creo, mejores bazas de la serie: la ambigüedad de sus aparentes elementos fantásticos. Dejemos a un lado la Ascensión, pues antes de empezar ya sabíamos que nunca tendremos una respuesta para eso y, de hecho, sobre esa premisa se sostiene todo. En una especie de juego interno, resulta incluso divertido ver cómo reacciona un personaje como Nora, la más afectada por tan terrible evento, cuando algunos intentan buscar una explicación científica (¡mal!) o religiosa (¡fatal!) a lo que aconteció aquel 14 de octubre. Pero aquí volvemos a tener otra larga lista de sucesos que bien podrían tener una explicación sobrenatural u otra mucha más lógica. Y parece haber un poco de ambas cosas, aunque siempre estemos moviéndonos en una fina y muy borrosa línea. Servirían unos pocos ejemplos. Cuando ya parecía claro que el maldito Holy Wayne no había sido más que un ruin farsante (aunque, espera… ¿ese tipo sabía cosas, no? O al menos parecía que las sabía…), se vuelve a sembrar la duda durante buena parte de la temporada a través del personaje de Tom. Al final, acabamos volviendo al mismo punto. John Murphy, uno de los grandes hallazgos del año, rechaza sin ningún resquicio de dudas que pueda haber milagros en Miracle, y se embarca en una cruzada sin cuartel contra aquellos que intentan aprovecharse de la ingenuidad humana. Pero lo de Isaac, su primera víctima (que veamos) es jodidamente real, ¿verdad? ¿Y Kevin? Cuando Laurie parece encontrar por fin una explicación psiquiátrica, y muy verosímil, a su ‘problema’, en un momento crucial de la serie el protagonista se decanta en cambio por la demencial vía propuesta por el inquietante Virgil. Y se lanza de cabeza. Durante una semana, estamos convencidos de que ha cometido un error fatal… Pero no. Kevin acaba visitando no una, sino dos veces ese hotel (sí, un hotel, para decepción del pobre Michael, el tipo más espiritual y religioso de la serie) que no queda claro si es el Purgatorio, o el Infierno, o la antesala entre la vida y la muerte… Yo, personalmente, no fue hasta ese momento, y para ello necesitamos 18 episodios, cuando por fin me atreví a abrazar el componente fantástico de la serie como algo real y plausible. Al final, incluso un desdichado John regresa a casa, tras arrastrarse entre los fuegos y las cenizas de ese Paraíso perdido, abatido por los acontecimientos y rendido a la evidencia de que hay cosas que no es capaz de entender.

  • I don’t understand what’s happening.
  • Me neither

The Leftovers Season 2 (9)

Pero todos los misterios que nos rodean, todos los acontecimientos que nos aturden y desbordan capítulo a capítulo, no son más que una mera excusa para lo que realmente importa, que es ver sus devastadores efectos sobre los personajes, y sobre nosotros los espectadores. Y es que, cuando nos reencontramos con ellos, no sólo no parecen haber superado sus aflicciones sino que están más dañados que nunca. Kevin está sumido en una pesadilla interminable, pues si Patti Levin acojonaba ya cuando estaba viva, soportarla cuando está muerta se antoja como el peor de los tormentos posible. Nora suma al dolor por su pérdida (y es que eso no hay un Holy Wayne que lo alivie) el pánico a perder lo que tiene ahora mismo. Matt tiene que padecer cada mañana el tormento de haber recuperado lo que más amaba en el mundo… y haberlo perdido de nuevo. Laurie puede creer haber escapado de los Culpables Remanentes, pero probablemente jamás logrará librarse de ellos. John y Erika, tremendos fichajes, esconden demasiada mierda bajo la alfombra, y son el reflejo perfecto de que Jarden, o Miracle, está muy lejos de ser ese lugar idílico que muchos nos intentan vender. Y Meg… bueno, digamos que se ha convertido en un monstruo que acojonaría a la mismísima Patti. Lo jóvenes siguen siendo, quizás, la gran asignatura pendiente de la serie. Jill parece ser la única que ha alcanzado cierta paz interior aunque en realidad, la mayor parte del tiempo, se limita a estar por ahí. Y ni siquiera es capaz de conseguir un buen polvo. Tom sigue pegando bandazos, siempre manejado por alguien, y aún está por ver si algún día será capaz de tomar las riendas de su propia vida. Y Michael no ha pasado de ser un personaje meramente instrumental.

The Leftovers Season 2 (11)

Creo que prácticamente todos coincidimos en resaltar que, el año pasado, “The Leftovers” brilló especialmente con esos capítulos que, dentro de la innegable osadía narrativa de la serie, lograron aún distinguirse y sobresalir sobre el resto, bien centrándose y profundizando en un personaje concreto, como sucedía con Matt en “Two Boats and a Helicopter” o con Nora en “Guest”, o bien viajando en el tiempo hasta los días previos a la Ascensión en “The Garveys at Their Best”, que nos permitía entender muchas cosas y se cerraba con un golpe tremendo, abriendo las puertas de esa finale, “The Prodigal Son Returns”, en la que ya todo explotó, dejándonos hechos añicos. En esta ocasión, Lindelof y compañía han redondeado aún mucho más la jugada y me atrevo a decir que no ha habido un solo episodio que no haya destacado por algo, regalándonos así diez joyitas, o joyazas, a cual más radiante. Si Jorge aseguraba hace un año, con muy buen criterio, que con su primera temporada daba la sensación de que «el conjunto» era «muy superior a la suma de sus partes», imaginaos qué nos queda ahora cuando lo que tenemos son estas diez piezas soberbias, únicas e indispensables. Nunca he sido muy amigo de escribir reviews al uso, o análisis concienzudos de las series capítulo a capítulo, pero en esta ocasión el peligro de no hacerle justicia a “The Leftovers” es tan alto que, en cierto modo, no queda más remedio que hacerlo.

The Leftovers Season 2 (12)

Y es que la serie consigue descolocarnos y entusiasmarnos ya con esa valientísima season premiere, “Axis Mundi”, que arranca con un flash-back bestial que nos traslada a una Jarden que aún no es Miracle… durante la prehistoria. Un prólogo sobrecogedor al que muchos aún andarán buscando más sentido del que en realidad tiene, que no es otro que servir como metáfora perfecta de “The Leftovers”. Durante el resto del episodio, con la introducción de los nuevos personajes y el nuevo emplazamiento, casi tenemos la sensación de estar viendo otra serie, de no ser por el tono, la tensión y la sensación permanente de que algo muy chungo está pasando o está a punto de pasar. Primero Matt y Mary, y luego la aparición de los Garvey, nos sirven para acabar conectando con su primera temporada, y cuando el episodio termina, en sólo 60 minutos nos han dejado ya una buena ristra de incógnitas con las que los guionistas, brillantemente, irán jugando durante el resto de la temporada.

The Leftovers Season 2 (14)

“A Matter of Geography” hubiese servido, en cambio, como continuación más lógica y natural al retomar la acción en donde la dejamos en la finale anterior, para mostrarnos después el viaje de los Garvey, o mejor dicho, Kevin, Nora, Jill y la pequeña Lily, desde Mapleton hasta Jarden, o Miracle, y muchos de los eventos del capítulo anterior desde su perspectiva. La partida se antoja ya apasionante y nos deja, al menos, una escena para enmarcar: ese juego de confesiones en la secuencia de apertura entre los dos grandes protagonistas de la serie. Con “Off Ramp” tenemos otra pieza del rompecabezas, también imprescindible y esta vez centrada en Laurie y Tom y su lucha contra los Culpables Remanentes, que claramente continúan siendo la gran amenaza. Con un cierre que vuelve a dejarnos sumidos en el asombro, “The Leftovers” sigue sembrando y nos pide de nuevo que tengamos paciencia porque todo lo que estamos viendo brotará, al final, en algo mucho más grande.

The Leftovers Season 2 (20)

“Orange Sticker” quizás sea la pieza menos brillante de todo el conjunto, aunque sea un ejercicio necesario, al seguir con una lógica narrativa algo más convencional la acción en Jarden en donde nos habíamos quedado. Nos deja, eso sí, aún más dudas de las que resuelve, y afianza a Patti como gran villana de la función. “No Room at the Inn” es, en cambio, colosal (y cruel) de principio a fin. Hermano mellizo del “Two Boats and a Helicopter” de la temporada anterior, su arranque es descorazonador (nunca volveremos a escuchar una canción como “Let Your Love Flow” de The Bellamy Brothers de la misma forma) para a continuación seguir las rigurosísimas desventuras de Matt en otra terrible jornada, esta vez acompañado por la desvalida Mary. La saña de los guionistas ya no parece tener límites. “Lens”, por su parte, añade más leña al fuego al plantear una interesante teoría, y no muestra una, sino dos bombas a punto de estallar… y finalmente ambas se juntan en la misma habitación y empiezan a sonar, y no es un simulacro, todas las alarmas. Nora y Erika nos regalan uno de los enfrentamientos más tensos y calamitosos del año. Y, de nuevo, otra confesión final abrirá la puerta para que se desate la caja de los truenos.

The Leftovers Season 2 (21)

Kevin Garvey Jr. (¡menuda forma de sudar, por cierto!) puede parecernos, al menos en estos primeros compases, uno de los mayores damnificados con este cambio de escenario, al quedar muchas veces arrinconado o eclipsado por los acontecimientos y el resto de personajes… hasta “A Most Powerful Adversary”. Empequeñecido por una Patti que le está, claramente, ganando la partida, cuando por fin decide hacerle frente empiezan los preparativos del duelo, y nunca la palabra ‘antihéroe’ cobró más sentido que aquí. Y la batalla definitiva no es otra que “International Assassin”, probablemente la mejor hora de televisión que el autor de este post haya visto en este 2015. Las mejores “Perdidos” y “Twin Peaks” se citan en un misterioso hotel y, acompañados (o martilleados) por el “Nabucco” de Verdi, nos embarcamos en un insólito, delirante y angustioso viaje que tendrá un desenlace demoledor. Jamás imaginamos que acabar con el peor de los villanos, derrotar al adversario más poderoso, nos resultaría tan doloroso. Como curiosidad, Nick Cuse, coautor del episodio junto a Lindelof, debuta como guionista con esta maravilla. No sorprende que sea hijo de Carlton Cuse. De casta le viene al galgo.

The Leftovers Season 2 (23)

Durante casi dos meses no dejé de preguntarme por qué el nombre de Liv Tyler aparecía en los títulos de crédito, y recibía el estatus de personaje regular, cuando su intervención se reducía a poco más que un cameo en “Off Ramp”. Con “Ten Thirteen” supimos por qué. Otro flash-back, esta vez hasta el 13 de octubre, día antes de la Ascensión, nos hizo entender muchas cosas. Qué gratificante resulta ver “The Leftovers” cuando todas sus piezas comienzan a encajar, y vemos además que lo hacen sin fisuras, y sin necesidad de trampas ni trucos sucios. Y, como ya hicieran en su primera temporada, qué extraordinaria forma de manejar la tensión, de construir con paciencia pero sin descanso durante nueve episodios un artefacto precioso y perfecto que, irremediablemente, terminará haciendo que todo vuelva a saltar por los aires.

The Leftovers Season 2 (25)

Llegados a este punto, todo hace presagiar que “I Live Here Now”, su season finale, será un cierre fastuoso y brutal. Se palpa en el ambiente la obligación de emular o incluso superar el impacto de ese torrente que ya casi se nos llevó por delante en “The Prodigal Son Returns”. Y no sólo no decepciona, sino que tiene todo, y digo absolutamente TODO lo que nos ha venido atrapando durante 19 episodios. Esta vez, las puertas del mismísimo Infierno se abren tras comprobar que la resolución de casi todos los enigmas era mucho más sencilla, pero a la vez más aterradora, de lo que imaginábamos. Pero la esperanza, también, llega como y cuando menos te lo esperas, y a veces descubres que, simplemente, estaba en una canción de Simon & Garfunkel.

The Leftovers Season 2 (27)

“The Leftovers” ha sido una serie sobresaliente a todos los niveles. En el plano técnico e interpretativo, impecable. Pero los grandes artífices de su éxito, más que nunca, han sido sus guionistas. Ignoro hasta qué punto Perrotta ha estado involucrado o comprometido con el desarrollo de la serie en esta temporada que ya no se apoya argumentalmente en su novela, finiquitada totalmente en la entrega anterior. Desconozco si se han usado esbozos o conceptos que planeó pero finalmente no incluyó en su libro, o posibles ideas que llegó a contemplar para una hipotética secuela que no llegó a escribir. O si en cambio él y Lindelof han trabajado codo con codo para, con una libertad absoluta y partiendo en cierto modo de la nada, llevar la trama a un nivel superior, ir mucho más allá de dónde pensábamos que llegarían y superar todas las expectativas. No sé cuánto crédito le corresponde al autor del texto original en el que se basa (o basó) la serie, pero de lo que no tengo dudas es de que gran parte del mérito, esta vez sí, debemos concedérselo a Lindelof. Él ha coescrito los diez episodios de esta temporada, tres de ellos con Perrotta (segundo, sexto y décimo). Para muchos, probablemente no haya nada que pueda hacer para redimirse después de haber jodido “Perdidos” y la saga “Alien” (como si no estuviese ya suficientemente jodida) con “Prometheus”. Yo, que fui, soy y seré siempre ‘Lostie’ (a mucha honra) y nunca le he odiado ni por una cosa ni por la otra, qué queréis que os diga, pero después de esto le he puesto en un pedestal muy alto, y le defenderé a muerte cuando sea y delante de quien sea. Creo que tengo, por fin, el argumento perfecto: «Callaos la puta boca y ved “The Leftovers”, ignorantes».

The Leftovers Season 2 (28)

Es precisamente la fe de Lindelof en el proyecto, y que parezca tener las cosas tan claras de cara al futuro, lo que me hace confiar en que merecerá la pena regresar a Jarden, o Miracle, en una hipotética tercera temporada. Se lo ha ganado. Aunque reconozco que, después de ver su finale, casi deseé que todo terminase aquí, quedándonos así con un final definitivo sencillamente perfecto. Porque, aún con todo, cuesta imaginar que puedan mantener semejante nivel. Hasta en eso, “The Leftovers” es única y consigue lo inimaginable: que uno de sus mayores fans rece con la misma fuerza por que la renueven y la cancelen. En cualquier caso, la decisión no está en nuestras manos. El hundimiento de sus audiencias en este curso puede llevarla de cabeza al tristemente célebre Cementerio de las Obras Maestras Injustamente Canceladas Antes de Tiempo por la HBO, con una lápida justo al ladito de “Deadwood”, “Carnivàle” y “Roma”. Pero también es cierto que “The Leftovers” ha competido esta vez con “The Walking Dead”, esa gran devoradora de rivales, por lo que siendo justos los números que debería mirar la cadena quizás no sean los de los audímetros, y sí los de IMDB.

The Leftovers Season 2 (30)

Mientras esperamos el veredicto de la HBO, se hace difícil no seguir dándole vueltas y más vueltas a esos prodigiosos instantes finales de la temporada. Una temporada que se abre y se cierra con un terremoto. Entre medias, nos han sacudido otros muchos. Pero al final, toda la angustia, toda la inseguridad, todos los miedos, todos los avatares por los que hemos tenido que pasar, y que nos han llevado más allá del que creíamos era nuestro límite emocional, todo ello se resume en una frase, o mejor dicho, en una pregunta.

  • What if there’s nobody home?

Así que todo se reducía a esto. Por eso, cuando abrimos una puerta, avanzamos en la oscuridad y comenzamos a reconocer el rostro de los nuestros dándonos la bienvenida, basta otra sencilla y certera frase para hacer que el pecho nos martillee y estallemos en un llanto liberador.

  • You’re home.

The Leftovers Season 2 (31)

Anuncio publicitario
13 comentarios leave one →
  1. 09/12/2015 9:35

    De las mejores series vistas en mucho mucho tiempo

  2. 09/12/2015 11:39

    Es una serie fantástica, a pesar de que sea raruna,intensa y llena de momentos WTF. Que no la cancelen, por favor.

  3. fran permalink
    09/12/2015 11:45

    ABSOLUTAMENTE GENIAL ! la serie y por supuesto Tu Review!!!uff… pues si , se acabó y es que ha sido una «paliza» tremenda, aun estoy K.O. como decia Alberto Rey esta serie habia que compensarla con otra mas light o comica,por que es cierto , terminaba un capitulo y te dejaba exhausto (no tanto como al bueno de Justin Theroux!) , no soy «lostie» por que no la vi , pero aqui Damon Lindelof casi me convierte en «lefti»o como se llamen los fans de esta impresionante serie. Patti for President ! ;)

  4. GuillemGuasch permalink
    09/12/2015 14:21

    Hacía mucho tiempo que no pasaba por aquí. Demasiado. Pido hasta disculpas: no hay ninguna página más con la que disfrute leyendo sobre las dichosas series que tanto nos entretienen. Poco más que añadir de The Leftovers. No se entienden algunas audiencias. Unas tanto y otras tan poco. Es lo de siempre. Quizás haya quien disfrute más de las tramas masticadas y previsibles. De acuerdo que no es una serie «fácil» pero ignorar semejante serie y que pase desapercibida puede hacer cometer a la HBO un epic fail de dimensiones considerables. Esperaremos pues a ver qué deciden. Mientras tanto van desapareciendo grandes series. Suerte que Fargo ha renovado y que The Good Wife sigue regalando episodios brillantes (lo siento, no me cansaré de reivindicarla). Ni Luther ni Sherlock llenan el vacío de Justified y SOA. Confiamos en Vinyl?

    Saludos!

  5. Javier permalink
    09/12/2015 16:41

    Magnífica review, Rodrigo. Llevo dos años leyéndoos y me he encontrado con grandes reseñas, pero ésta, sin duda, con la que más he conectado. Ha resumido perfectamente lo que pienso y siento sobre «The Leftovers», Damon Lindelof y cía. Enhorabuena.

    PD: Yo también soy un «lostie» a mucha honra,xD!

  6. Señora Articulada permalink
    10/12/2015 11:07

    Oye, olé tú. Menudo análisis. Me he quedado estupefacta. Creo que nunca había leído algo así sobre una serie. ¡Y qué serie! La mejor del año. Y para mí, está en mi top 5. The Leftovers es una obra maestra.

  7. charlyte permalink
    12/12/2015 0:43

    Enhorabuena por este artículo tan bien escrito. Y gracias por poder leer algo tan bien tratado sobre una serie extraordinaria. Desafortunadamente, nadie de mi entorno la ha visto. Ni la verá, tal como se la voy describiendo. ¿Qué puedo hacer para que caigan en este «lado oscuro»? Sinceramente, tampoco estoy muy por la labor proselitista. Sólo me queda relamerme del gusto y disfrutar de esa sensación «indie» (ya me entendéis).

    Un nuevo seguidor de este magnífico blog

  8. amparo permalink
    29/09/2016 21:33

    Pues la serie diréis que es increíble pero me he tragado las dos temporadas y no vale la pena que sea tan enrredosa como es. Si que es cierto que es una serie difícil pero también en cierto que es a veces absurda y deja cosas abiertas. En fin para gustos, colores.

  9. Angelito permalink
    09/08/2022 20:10

    ¿Pero qué pasa aquí? ¡Estamos en 2022, se cerró la serie con una tercera temporada y aquí nadie ha chistado ni opinado nada sobre ella!

Trackbacks

  1. “The Affair”: De océanos y tormentas | El Cadillac Negro
  2. “Transparent”: el drama generacional de los Pfefferman | El Cadillac Negro
  3. “The Leftovers”: Obra Magna | El Cadillac Negro

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: