Nuestras series de 2016
No ha resultado una tarea sencilla escoger nuestras series favoritas de 2016. Este año ha llegado bien cargado de nuevos productos sobrados de calidad, nos ha dejado temporadas de series ya míticas en el Cadillac muy merecedoras de su posición en el olimpo y la parrilla se ha llenado de nostalgia. Por supuesto, el papel de espectadores no es carente en materia de decepciones con respecto a algunos regresos esperados. Despedidas, encuentros, bienvenidas… De todo encontraréis, parroquianos nuestros, en este listado particular.
No pretendemos caer en un festival de repeticiones, pero por si tras estos años no ha quedado claro, y sobre todo para nuestros lectores nuevos, las quince elecciones que se van a detallar a continuación son producto de la subjetividad y aquí no estamos para sentar cátedra. Los conductores del Cadillac no han visto todo lo emitido en el presente año ni han formado parte de una cola para obterner el carnet de seriéfilos de pro. No compartiréis algunas de nuestras preferencias y echaréis en falta algunas vuestras. La gracia, precisamente, está en esa criba que hace que todas las conversaciones de los seis miembros del equipo en los días previos a la publicación lleven como fondo la banda sonora de nuestro primer puesto.
1. JUEGO DE TRONOS (HBO)
Como esta no es una lista personal, sino una lista colectiva de seis personas, “Juego de tronos” se ha beneficiado de que ha sido vista por casi todos los redactores de este blog, y todos los que la han visto la incluyeron este año, más o menos destacada, entre sus favoritas. Cierto es que cuando analizamos su sexta temporada aquí no dudamos en sacarle sus vergüenzas, que también las tuvo, pero sobre todo nos rendimos a la evidencia de que sus últimos episodios, “Battle of the Bastards” y “The Winds of Winter”, fueron probablemente las mejores dos horas vistas en una pequeña pantalla en mucho, muchísimo tiempo. Recordemos además el momento ‘Hold the door’ y otros notables aciertos y caeremos en la cuenta de que, dentro de unos años e incluso décadas, veremos muchos de los eventos que nos regaló esta serie en 2016 como hitos televisivos. ¿Y lo bien que pinta lo que aún está por venir? No, no hay duda: “Juego de tronos” es hoy por hoy la Reina absoluta. (Más sobre “Juego de tronos” aquí).
2. HORACE AND PETE (Pig Newton)
Si nuestro número uno era más anunciado que la muerte de Santiago Násar, reina y señora en todos los espacios del mundo seriéfilo, en nuestro segundo puesto tenemos una joya que no sólo se ha posicionado por mérito propio, sino que ha estado a punto de desbancar a los dragones. Louis C. K. ha firmado un producto cuidado y que derrocha buen hacer. Un testimonio del funcionamiento social, la opinión política y el drama de la tradición. Un espacio donde se detiene el tiempo y la vida pasa sin pena ni gloria. Un reparto asombroso y la pesadumbre como postre. Aquí ya no hay espacio para la comedia, ni siquiera para la triste. (Más sobre “Horace and Pete” aquí).
3. STRANGER THINGS (Netflix)
Si, al igual que ocurría en la serie, existiera un mundo paralelo en el que Steven Spielberg decidiera adaptar una novela de Stephen King, el resultado no sería muy diferente de los magníficos ocho episodios que «Stranger things» nos ofreció este año. Convirtiéndose en una rotunda demostración de lo poderosa que puede ser la nostalgia cuando se combinan con maestría grandes referentes como «ET», «Encuentros en la tercera fase», «It», «Cuenta conmigo», «Los Goonies», «Poltergeist»; por no hablar de la conexión con aquellos años que ya supone el hecho de contar entre el reparto con Winona Ryder y Matthew Modine; sin desmerecer por ello al elenco de jovenes actores protagonistas (con la excelente Millie Bobby Brown al frente). Disfrutemos de las luces de navidad, porque pronto volverán a componer mensajes del más allá. (Más sobre «Stranger Things» aquí).
4. BETTER CALL SAUL (AMC)
Si algo ha confirmado “Better Call Saul” con su segunda temporada es que NO es “Breaking Bad”. Dicho esto como una feliz noticia. Por supuesto que el estilo y algunos dejes son muy reconocibles, y que indaga en el universo creado por la serie madre, y lo expande, con un constante ejercicio de autorreferencias, guiños y juegos con el espectador, pero “Better Call Saul” ha hecho eso y mucho más sin renunciar a encontrar su propia voz y marcarse su propio camino. Y nunca por la vía fácil. Mientras, va edificando uno de los personajes más complejos y fascinantes que hayamos visto en una serie de televisión, con un Bob Odenkirk en estado de gracia. Vince Gilligan y Peter Gould no parecen tener prisa. Nosotros tampoco. Que nos dure muchos años. (Más sobre “Better Call Saul” aquí).
5. VINYL (HBO)
“Vinyl” era esa serie que los amantes del rock n’ roll en general, y de los años 70 en particular, llevábamos toda la vida esperando. Pero si la HBO fue muy valiente renovándola tras un estreno discreto en audiencias, bien canalla fue cancelándola cuando ya habíamos disfrutado de su primera temporada. Porque sí, por aquí hemos disfrutado con ella una barbaridad. Muchos la criticaron por tener a un protagonista pasadísimo, una trama exageradamente ‘scorsesiana’ y estar demasiado enfocada a los melómanos, siendo menos accesible o atractiva para otro tipo de públicos. En el Cadillac nos encantó por todos esos motivos. No, nunca le perdonaremos a la HBO que nos la haya dejado en ‘one-hit wonder’ cuando muchos le augurábamos una larga carrera repleta de éxitos. (Más sobre “Vinyl” aquí).
6. DAREDEVIL (Netflix)
En un mundo invadido por los superhéroes hasta rozar (algunos pensarán que hasta sobrepasar) el hartazgo, en este blog defendemos, por segundo año consecutivo, que “Daredevil” es lo mejor que podrás ver de este género en la pequeña pantalla. Y de lo mejor del género así, en general. Los temores por el cambio de showrunners se disiparon pronto cuando vimos que su segunda temporada conservaba todos sus aciertos y además la serie crecía con su protagonista, dándonos otra tanda de episodios adictivos y espectaculares. Con escenas de acción memorables, un equilibrio casi perfecto en unas tramas con varios frentes abiertos, y la feliz aparición de personajes esenciales en la biografía del ‘cuernecitos’, como una convincente Elektra y un apabullante Punisher. Nos reencontraremos con el Hombre sin Miedo en “The Defenders”. Ya puede ser buena para que nos compense esperar hasta 2018 para volver a disfrutar de sus aventuras en solitario. (Más sobre “Daredevil” aquí).
7. HOUSE OF CARDS (Netflix)
En un año de elecciones, los Underwood se postularon a La Casa Blanca para demostrar que, por muy exagerado que pueda parecernos la mejor ficción política de la televisión, la realidad siempre la supera. Bajo falsas promesas de paz, justicia, seguridad, menos impuestos o simplemente la intención de hacer nuevamente grande a nuestra nación (que no «inteligente»), la política de nuestros días acaba reducida a un grotesco espectáculo con el único objetivo de obtener tu voto cada cuatro años. Atrás, perdidos en el olvido, quedaron aquellos hombres y mujeres que lucharon por conseguir sociedades más justas. Por delante sólo nos quedará el legado que nos dejen nuestros actuales manipuladores de masas: caos, ruina, hambre… terror. Afortunadamente, es infinitamente más sencillo disfrutar del horizonte que Netflix nos dibuja, que de aquel que la realidad nos impone. (Más sobre “House of Cards” aquí).
8. AMERICAN CRIME STORY: THE PEOPLE VS. O.J.SIMPSON (FX)
“Juego de Tronos” al margen, la gran triunfadora de los Emmy 2016 fue esta miniserie auspiciada por el temible Ryan Murphy que en un principio casi nadie sospechaba que pudiese ser tan rematadamente buena. Pero la primera entrega de “American Crime Story” se las arregla para que un caso tan conocido y trillado a estas alturas como el de O.J. Simpson se nos presente con el pulso adictivo del más vibrante thriller de suspense y la profundidad del mejor drama de personajes; porque sí, las de Sarah Paulson, Sterling K.Brown y Courtney B.Vance han sido tres interpretaciones grandiosas, de las que justifican cualquier galardón y posición de privilegio en toda lista anual que se precie. (Más sobre “American Crime Story” aquí).
9. WESTWORLD (HBO)
Andaba la HBO en busca de un producto estrella que empezara a tomar el asiento que en breve dejará vacante la imbatible «Juego de tronos», con todos los focos apuntando a «Westworld», y tras la finalización de su primera temporada todo confirma que las apuestas eran acertadas. Tomando como punto de partida un particular parque de atracciones futurista en el que los visitantes-huéspedes pueden vivir junto a los robots-inquilinos una auténtica aventura en el lejano oeste, la serie se va convirtiendo en un tratado filosófico sobre la creación, el destino y la verdadera naturaleza humana. Además de por las grandes audiencias obtenidas, el éxito de «Westworld» puede certificarse por la gran repercusión que ha ido adquiriendo en internet a base de comentarios y teorías que intentan explicar lo sucedido semana tras semana y lo que está por venir. Y aunque lo que está por venir es una incógnita, esta primera entrega no ha decepcionado.
10. THE X-FILES (Fox)
La vuelta de uno de los productos televisivos más míticos de los 90 se produjo en enero y trajo consigo un revuelo brutal que, como todos los revuelos, tuvo las expectativas en su contra. Los guionistas de Expediente X aterrizaron en nuestras pantallas para jugar con la nostalgia y darnos a unos personajes rotos por el paso de los años. Si bien la opinión negativa se extendió como pandemia, propiciada por un cliffhanger que nos partió en dos y puede ser fatal para el programa si la resolución no existe, dentro de esas seis entregas surgieron maravillas dignas de evocar a los buenos años. Tuvo sus fallos, pero los espectadores rebasaron los límites con sus exigencias de seriéfilos intelectuales y los juicios acabaron por ser injustos. Mulder y Scully están muy vivos, duermen en nuestra lista y se resguardan en la ilusión colectiva. (Más sobre “The X-Files” aquí).
11. PEAKY BLINDERS (BBC)
“Peaky Blinders” siempre ha sido dinamita pura. Gángsters, cuchillas y rock’n’roll, como rezaba aquel post con el que la presentamos en nuestro Cadillac. Quizás lo único que le falta, al menos en España, son espectadores y gente que le escriba, porque el show de la británica BBC 2 ha sabido evolucionar desde la explosividad pirotécnica de sus inicios hacia el trazo y el tono de un auténtico clásico moderno, y siempre sin dejarse sus señas de identidad por el camino. En su tercera temporada los Peaky Fuckin’ Blinders se han puesto a prueba a sí mismos, aventurándose más allá de las mugrientas calles de Small Heath, pero el resultado ha vuelto a ser gloriosamente salvaje. (Más sobre “Peaky Blinders” aquí).
12. NARCOS (Netflix)
Tras su definitiva explosión mediática, una de las series emblemáticas de Netflix, «Narcos», por fin debuta en nuestros repasos anuales gracias a una segunda temporada en la que ha conseguido el difícil reto de -prácticamente- igualar su tremendamente adictiva entrega inaugural cambiando su ‘status quo’ y pasando de una frenética sucesión de acontecimientos a un desarrollo más profundo y ralentizado en el que la figura de Pablo Escobar -y su excelente interpretación a cargo de Wagner Moura– brilla por todo lo alto.
13. TRANSPARENT (Amazon)
Es magnífico que un producto tan sencillo como «Transparent» se haya colado (y de manera merecidísima) por tercer año consecutivo en nuestra lista. Maura Pfefferman sigue confirmándose como un símbolo de lo difícil que es perseguir nuestra propia identidad, que se encuentra perpetuamente en construcción, y de las etiquetas y la falta de información acerca del colectivo transexual. Una serie sobre el dolor, sobre las relaciones y la construcción de nuestro propio «yo». Una serie sobre el miedo y el rechazo, con una familia que no está rota en sus circunstancias colectivas sino en sus maneras individuales. (Más sobre “Transparent” aquí).
14. THE AMERICANS (FX)
Tres años después de su debut, volvemos a acoger a “The Americans” entre nuestras elegidas. Tras aquella refrescante primera temporada que sí concitó muchas atenciones, el programa de FX fue siguiendo su propio camino, apartada de los focos de la industria de grandes premios y del público masivo, pero ya no se puede seguir ignorando que esta serie es una de las imprescindibles del panorama actual. A la altura de su cuarta temporada, “The Americans” atraviesa su mejor momento, aunque para los Jennings, esa inolvidable pareja de agentes de la KGB infiltrados en el sueño americano, el precio a pagar por mantener a flote sus convicciones cada vez sea más inasumible. (Más sobre “The Americans” aquí).
15. THE YOUNG POPE (HBO)
Que Sorrentino ha firmado una de las mejores series de 2016 no es un secreto. Es una lástima que habiendo llegado tan tarde en el Cadillac aún no hayamos podido escribir de ella ni darle una mejor posición, pero la historia de Pío XIII no deja indiferente a nadie. Con una imagen cuidadísima y unos guiones mimados al detalle, el espectador pasa de la emoción más pura a la risa. Pasa de la indignación al atracón de humor negro. Bella, mordaz, inteligente, con Jude Law interpretando a un papa tan conservador como poco convencional, «The Young Pope» es una de nuestras recomendaciones más fervientes del año.
La segunda de Daredevil fue muy decepcionante en comparación con la primera. El mejor momento es cuando aparece Kingpin y después esta llena de momentos desperdiciados. Los villanos son aburridos y las peleas no están a la altura de la primera. La incorporación de Punisher, que me hacía creer que sería impactante para la serie, termino siendo bastante patética y Elektra esta bastante bien pero no alcanza para salvar la temporada. Sigo sin poder creer la oportunidad que desperdiciaron con estos tres personajes juntos.
Chance, Paranoid, Quarry ,Vinyl, The Missing
Totalmente de acuerdo con Vinyl. Yo debo ser de los pocos que también se quedaron enganchados con ella. La serie se fue enderezando al final de la temporada y aunque una de las tramas era demasiado bizarra (un caso similar a la Season 2 de Friday Night Lights, serie que luego remontó y esta considerada como una de las grandes), en conjunto estaba bien hecha, bien ambientada, con personajazos y con guion solido. Vale, estaba enfocada a los que amamos la música y se metían muchos artistas conocidos con calzador (john lennon y yoko, por ejemplo) pero la trama de Elvis fue graciosa o el homenaje a David Bowie.
No entiendo porque no se la renovó para una segunda temporada. Supongo que sería por su presupuesto (se dispararía con la cantidad de derechos de autor y demás) pero desde luego no por su calidad. Me duele que haya críticos que la pongan a caer de un burro cuando estoy seguro que ni la acabaron de ver.